Leonard Cohen fue poeta mucho antes de decidirse a coger una guitarra. A pesar de su voz de barítono (o bajo) sobre austeros arreglos, Cohen es un letrista de infinito talento que cautiva al oyente. New Skin For The Old Ceremony podría ser el álbum más musical de Leonard Cohen, ya que está acompañado por violas, mandolinas, banjos, trombones, trompetas y la percusión que dan a su música más textura de lo habitual. Todo esto propiciado por el cambio en la producción. Leonard Cohen buscó a un desconocido John Lissauer para que hiciera su primer trabajo. Pero tras oírlo una y otra vez, posiblemente llegas a la conclusión (o al menos eso me pasa a mí) de que es un de sus discos más sobrios. Su voz es probablemente más tensa que en sus trabajos previos, las canciones se entregan con más pasión de lo habitual y tiene, además, voces de fondo (incluyendo Janis Ian) que se suman de manera significativa a crear un sonido más completo. No es de extrañar, sin embargo, que generalmente utiliza estructuras de las canciones simples para llamar la atención sobre las palabras ( "Who By Fire"). Las letras están llenas de imágenes abstractas pero repletas de colores brillantes, el álbum utiliza principalmente la metáfora del amor y las relaciones como campos de batalla ( "There Is A War", "Field Commander Cohen"). Este es el disco que cierra la primera parte de Cohen, sus cuatro primeros LPs de estudio. Tras este, tres años de espera hasta el difícil Death Of A Ladies' Man.
Comienza el álbum con "Is This What You Wanted", primeros segundos con guitarra y voz, pero enseguida el viento metal de fondo y un estribillo con marchilla y percusión
Tú eras Marlon Brando, yo era Steve McQueen
Tú eras K.Y. Jelly, yo era vaselina
Tú eras el padre de la medicina moderna, yo era Mr. Clean
Tú eras la ramera y la bestia de Babilonia, yo Rin Tin Tin
Y llega la primera joya del disco: "Chelsea Hotel #2": en el mismo hotel donde murió Dylan Thomas por excesiva ingesta de alcohol en 1953 y Nancy Spungen, novia de Sid Vicious, acuchillada en todavía no aclaradas circunstancias en 1978, donde se han hospedado innumerables escritores como Mark Twain, Arthur Miller, Tennessee Williams, actores/directores como Milos Forman, Stanley Kubrik, Dennis Hooper, Jane Fonda, músicos como Jimi Hendrix, Bob Marley, Edith Piaf, Keith Richard, Bob Dylan, Joni Mitchell... Leonard Cohen tuvo una historia con Janis Joplin. Cuenta la leyenda que una noche, ya tarde, Janis regresaba a su cuarto cuando se cruzó en el ascensor con Cohen. Janis le preguntó si sabía dónde se hospedaba el Kris Kristofferson, que había regalado a Joplin “Me and Bobby McGee”. Cohen, contestó: “Señorita, está usted de suerte el día de hoy: yo soy Kris Kristofferson”. La broma hizo gracia y el truco funcionó. Ambos pasaron la noche juntos, sólo fue una noche, pero dio lugar a una de las mejores canciones del canadiense. Otra leyenda sostiene que Cohen iba buscando a Brigitte Bardott (o a lo mejor las dos cosas son ciertas).
Te recuerdo claramente en el Hotel Chelsea,
hablabas tan segura y tan dulce
haciéndome sexo oral en una cama deshecha
mientras en la calle te espera la limusina.
Esas eran las razones y eso era Nueva York,
nos movíamos por el dinero y la carne
y a eso lo llamaban amor los cantantes,
probablemente aún lo es para los que quedan.
Ah, pero te fuiste, ¿verdad nena?
Simplemente le diste la espalda a la gente
y te fuiste y ya nunca volví a oirte decir:
te necesito, no te necesito,
te necesito, no te necesito.
Mientras todo aquello te bailaba alrededor.
Te recuerdo claramente en el Hotel Chelsea.
Ya eras famosa, tu corazón era una leyenda.
Volvías a decirme que preferías hombres guapos,
pero que conmigo harías una excepción.
Y cerrando el puño por los que, como nosotros,
están oprimidos por los cánones de la belleza
te arreglaste un poco y dijiste:
Bueno, no importa, somos feos pero nos queda la música.
Ah, pero te fuiste, ¿verdad nena?
Simplemente le diste la espalda a la gente
y te fuiste y ya nunca volví a oirte decir:
te necesito, no te necesito,
te necesito, no te necesito.
Mientras todo aquello te bailaba alrededor.
Y no pretendo decir que yo te amara mejor
No puedo llevar la cuenta de los que cayeron.
Te recuerdo claramente en el Hotel Chelsea.
Eso es todo, ni siquiera pienso en ti tan a menudo.
"Lover Lover Lover" es la canción con más ritmo del LP (junto a "There Is A War", que comparten tono, ritmo, melodía...), y "Field Commander Cohen" la más extraña (working for the yankee dollar). "Why Don't You Try" con su aire country (por el banjo) es un tema muy agradable. "A Singer Must Die" es una vuelta a guitarra/voz en el inicio, entrando uno de los más claros arreglos orquestales a lo largo de la canción. "I Tried To Leave You" redunda en la idea de "Why Don't You Try", pero peca de monótona. Hasta aquí el álbum posiblemente no nos ha ofrecido demasiado (a excepción de la parada en el Hotel). Pero quedan tres temas.
Os dejo una maravillosa versión de "Who By Fire", una de mis canciones favoritas (no solo de este disco). Esta actuación creo que es del programa de la televisión americana "Sunday Night Live" (también conocido como "Night Music"). Fue puesto en antena el 13 de febrero de 1989. Al saxo, Sonny Rollins.
WHO BY FIRE
And who by fire, who by water,
who in the sunshine, who in the night time,
who by high ordeal, who by common trial,
who in your merry merry month of may,
who by very slow decay,
and who shall I say is calling?
And who in her lonely slip, who by barbiturate,
who in these realms of love, who by something blunt,
and who by avalanche, who by powder,
who for his greed, who for his hunger,
and who shall I say is calling?
And who by brave assent, who by accident,
who in solitude, who in this mirror,
who by his lady's command, who by his own hand,
who in mortal chains, who in power,
and who shall I say is calling?
Y termina el disco con dos muy buenas canciones: "Take This Longing", incluida en su "Greatest Hits" y "Leaving Green Sleeves", una personal versión de la tradicional canción folk "Greensleeves", en la que sobre el fondo musical a ratos de la conocida canción, Cohen desgarra su voz (cosa que en algunos comentarios leídos por ahí, parece que no gusta demasiado). Y una curiosidad: en España la portada, reproducción de un grabado del siglo XVI donde aparecían dos ángeles haciendo el amor, salió censurada, con otro ala... eran otros tiempos (1974).
Disponible en Nuestra Fábrica:
1967 - Songs Of Leonard Cohen
1971 - Songs Of Love And Hate
Os proponemos el CD a 320 Kbps y un ripeo del vinilo en FLAC
LOOK FOR: ANGEL y ANGELV1-3
3 comentarios:
pass: katetoskopio/leonardcohen
Yo lo encuentro un disco.... deslavazado, inconexo, mal producido. Estoy de acuerdo en las 3 o 4 grandes canciones, pero esa es mi impresión.
Gracias
knownot
La verdad es que es una producción muy rara. Mucho instrumento novedoso, pero es de sus discos más desnudos para mi gusto.
Gracias por pasarte, knownot
kk
Publicar un comentario